El abril de 2018 entró en vigencia la política de cero tolerancia, según la cual cualquier adulto que fuera detenido luego de cruzar la frontera de manera ilegal sería procesado por haber cometido un delito. Como los niños no podían estar encarcelados junto a sus familiares adultos, las familias eran separadas y los menores no podían ver a sus padres. Neris González, una trabajadora consular, vivió este drama de cerca y hoy nos cuenta su historia.
En el año 2018, miles de familias de inmigrantes fueron separadas a causa de la política de tolerancia cero, una medida que tomó el gobierno para controlar el flujo migratorio.
Neris González, una trabajadora consular de El Salvador, vivió de cerca el drama de padres y niños que eran separados en contra de su voluntad en Texas. Neris también fue víctima de tortura y el sufrimiento de los migrantes le hizo revivir viejas heridas.
Hoy nos va a contar el horror que vio en la frontera.